Al haber visto tantas fotos de gente que tiene alfombras en sus cocinas, igual te han dado ganas de tener una tú también. Pero, ¿cómo lo hacen? ¿No es mejor cubrir todo el suelo con moqueta?
Te vamos a dar una serie de tips para incluir alfombras en la decoración de tu cocina y que estas queden bien. Toma buena nota, para que todo quede genial.
¿Por qué no se puede poner moqueta?
Mucha gente ve las fotos de hace varios años y al ver que se usaba mucho la moqueta le entran ganas de ponerla en sus casas. Y, sin embargo, no es lo más idóneo que uno debería hacer. La moqueta se ensucia y pudre con facilidad, y aunque hoy en día haya materiales que son fáciles de limpiar, siguen quedándose las manchas.
Aunque vaya a ser una opción más económica que la de poner varias alfombras, o incluso poner un suelo bonito, descártala. Es mejor apostar por unas pequeñas alfombras.
El mejor material para una alfombra de cocina: el vinilo
No creas que las alfombras que se ponen en la decoración de cocinas son de felpa o poliéster, no. Esos materiales son complicados de limpiar, y una sola mancha puede ser un suplicio para sus propietarios.
Las alfombras para una cocina tienen que ser alfombras fabricadas en vinilo. ¿El motivo? Es un material que, aunque se manche, se puede quitar la mancha con suma facilidad, pasando un mocho o metiéndola en la lavadora. Además, son muy finas y cómodas de pisar.
¿Dónde se ponen las alfombras en una concina?
Aquí ya todo depende de gustos. Ahí a quien le gusta descalzarse mientras está cocinando o fregando, por lo que ubica las alfombras siguiendo la forma de los muebles de la cocina, justo a los pies de esta.
Como ya te hemos comentado antes, dado que es un material fácil de limpiar, no tienes que preocuparte porque se manche o se moje, porque es fácil de limpiar. Puedes comprar modelos diferentes, para que no parezcan tan sosas. Siempre con un diseño que respete la decoración, claro está.
Por otro lado, está la opción de poner una alfombra en la puerta del jardín/patio/balcón. En oriente es común cambiarse de calzado a la hora de salir al exterior. Si eres de realizar esta práctica, pues ya tienes un tipo de alfombra que puedes poner en esta puerta.
Por último, está la clásica opción de poner una alfombra justo debajo de la mesa de comer. Si tienes una cocina grande y has metido una mesa para comer, la alfombra servirá como elemento divisorio de esa zona. Y como es de vinilo, no importa lo mucho que se manche, porque podrás aspirar la comida y limpiarla en un pispás.
En el caso de que tengas una isla en la cocina, con taburetes para sentaros a desayunar, también quedaría bien ponerla a los pies de esta. Estéticamente, es una opción llamativa, no se estropeará por el peso de las patas y aportará mucho carácter a la decoración de tu hogar.